NI BUENO NI MALO, PERO…

Hace tiempo que no puedo (ni debo) clasificar las cosas entre buenas y malas. Sin embargo me dejo un lugar para decidir qué es lo que me gusta y lo que no. Y no, no me gustan los absolutismos. Y menos si hablamos de Halterofilia.

ASÍ NO, BORREGO.

«Eso no se hace así, se debe hacer asá».

Hay que estar muy muy pero que muy seguro para hacer afirmaciones de ese calado. Visto lo visto, ni Isaac Newton o Stephen Hawking podrían haber tenido el derecho para establecer absolutismos en sus campos viendo los últimos avances en física, cosmología o matemática. Y hablamos de algunas de las mentes más privilegiadas de la historia de la humanidad.

Como para decir, a la hora de hablar de halterofilia, que algo es absoluto.

DEPENDE, PRUEBA.

Me hace muy feliz ver la interacción que disfruto en mi canal de youtube. Decenas de comentarios acompañan cada vídeo de Halterofilia que subo. La mayoría preguntas y dudas acerca de la técnica y  programación. Mi respuesta más habitual es «depende, pruébalo». Y es mi más sincera, al menos. Lo mismo te digo un día que no golpees la barra y un tiempo después ganas un campeonato nacional golpeando la barra como si no hubiera Dios… Mejor no cagarla y quitarle a alguien el derecho del propio camino.

ESTO ES ARTE. 

La halterofilia es brutalmente individualizable. Existen checkpoints claros en todos, pero me gusta pensar en la halterofilia como una gran tribu de artistas donde todos parten con un caballete, un lienzo, pinceles, los colores básicos y la paleta. A partir de ahí me ilusiona pensar que cada uno empieza a imprimir su sello artístico. Sus invenciones, creaciones, innovaciones y características personales.

No hay dos levantamientos iguales ni 2 entrenamientos iguales. Como no hay dos personas iguales. ¿Cómo voy a poder decir que algo es sólo de una determinada manera en Halterofilia? Imposible.

DEMASIADAS VARIABLES.

Caderazo o no, zapatazo o no, sentadilla frontal o trasera, tirones o no, altas repeticiones en sentadilla o bajas, barra pegada o separada, rodilleras o no, split jerk o power o squat jerk, entrenos sobre el 75% o pesado cada día, sentadilla dos o tres o cuatros veces a la semana…

Como veis, las variables de entrada son tantas, que al multiplicarlas sobre las peculiaridades innatas de cada atleta, que resulta como poco ATREVIDO hablar en términos de absoluto o no, verdad o no. Al menos, dejen espacio para que la gente experimente, se equivoque y saque sus propias conclusiones.

NADA SERVIRÁ EN 100 AÑOS.

Si vemos la Halterofilia hace tan sólo 50 años podremos hacernos una idea de lo que puede llegar a cambiar el deporte en tan poco tiempo. Y de lo equivocados que podríamos estar en estos momentos sobre lo que consideramos, hoy en día, verdad absoluta. 

Joan Gallardo.