«Son pequeñas, les falta carne». Uno cree que tiene unas buenas piernas hasta que @coachpapayats y @holyinstantrice te dan una buena hostia soltándote algo así.

De repente tus piernas te parecen pequeñas. Y quizá sí lo sean para los objetivos que tienes. Así que te suenas los mocos del sopapo y te pones a trabajar. Como debe ser, joder.

Dicen que antes de pensar en programas para fuerza conviene mirarnos las piernas y evaluar si es necesario una fase de hipertrofia para hacerlas crecer. Y como dice Yatsek: «Lo más seguro es que no las tengas tan grandes», así que ya sabes.

Una bala puede atravesarte el corazón pero no puede derribar una casa como una bola de cañón. Piénsalo.

PAZ.